Bueno, me encomendé a mi ángel de la guarda, a mis musas, a los dioses de la noche... y al final todo llega. En este caso el dinero... tan necesario!
Menos mal porque empezaba a sentirme incómodo en casa de Andrea (y ella a ponerse como se pone a veces de rallada... y mira que es una tía estupenda, vamos, se ha convertido en mi mejor amiga).
El curro del catering está muy bien, bueno, desde que descargas el camión hasta que vuelves a cargarlo es una paliza, pero de camarero se conoce mucha gente y ya en mi primer día tuve algún momento divertido y muy buenas migas con los compañeros de la empresa.
Vamos, entre con muy buen pie y me ha dicho el jefe que a los clientes les gusto mucho.
Problema: no sé cuándo me volverán a llamar, espero que no se quede en comuniones y bodas de fin de semana...si no no salen los números.
Contigo, Jonás, hasta ir al supermercado es una aventura... no imaginaba que iba a estar tan bien con alguien, después de tantos palos y sabiendo lo difícil que es convivir. Bueno, lo nuestro todavía no sé si es convivencia: ese ir y venir a tu casa, que si tu abuelo, que si tu padre... y no digo ya tus colegas pijos y las prácticas de Arquitectura. Menudo lío te has montao... y si te lo digo es porque no te veo que sepas manejarlo, más bien al contrario...
pero como tú siempre tienes la verdad absoluta, y no se te puede decir nada...
¡a ver cuándo tenemos nuestro propio sitio! (y un día entero para quedarnos follando)
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